Diu de cobre

6 preguntas clave sobre el DIU de cobre

Uno de los métodos anticonceptivos reversibles de larga duración más conocidos es el Dispositivo Intrauterino o DIU de Cobre. Aunque en España su uso no está tan extendido como en otros países, la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que en todo el mundo hay unos 160 millones de mujeres que utilizan este sistema. ¿Qué sabemos sobre este dispositivo y sus aplicaciones? En este artículo vamos a dar respuesta a 6 preguntas clave relacionadas con los DIU de cobre:

1. ¿Cuál es el mejor tipo de DIU de cobre?

Un DIU es un perqueño objeto de plástico que tiene forma de T. Tiene dos brazos flexibles y se acomoda fácilmente en el útero para impedir temporalmente el embarazo. Los DIU de cobre han ido evolucionando mucho a lo largo del tiempo y actualmente hay una amplia variedad de modelos disponibles.

Los más recomendables, tal y como indica la propia SEGO,  son los DIUs de tercera generación o liberadores de cobre de alta carga (>300 mm). Además de los de cobre, existen otro tipo de DIU, los hormonales, que liberan progestina para lograr el mismo efecto.

2. ¿El DIU es un método seguro? ¿Cómo funciona exactamente?

El DIU es un método muy eficaz, pues una de sus ventajas es que no requiere de la participación de quien lo utiliza, sino que una vez instalado actúa por si solo. Esto favorece su adecuado cumplimiento y hace que la tasa de continuidad sea elevada.

Los DIUs con una mayor concentración de cobre (unos 380 mm) son los que tienen una mayor eficiencia. En estos casos las tasas de embarazos escilan entre 0,1 y 1,0%.

Hay diversos mecanismos de acción para los DIU de cobre. De este modo, mientras que algunos actúan destruyecto los espermatozoides otros lo hacen impidiendo su paso al espesar el moco del canal del cuello del útero.

3. ¿Se debe tomar alguna medida especial antes de la inserción del DIU?

Lo más importante es asegurarse de que no existe ninguna posibilidad de embarazo antes de la inserción. El especialista también deberá evaluar si hay signos de infección durante la exploración previa que se realiza.

Además, tu ginecólogo de confianza te informará de todos los detalles sobre este método anticonceptivo y la duración de este efecto. Asesorará también sobre posibles cambios en el patrón menstrual, como un periodo más prolongado o abundante, sangrado irregular o dolor. Estos efectos suelen ser transitorios y tienen a desaparecer después de 3 a 6 meses de uso.

4. ¿Cómo se coloca y se extrae un DIU?

Siempre que se tenga la seguridad de no estar embarazada, puede colocarse un DIU en cualquier momento del ciclo menstrual. El proceso es sencillo, suele durar unos 15 minutos y puede hacerse dentro del consultorio con un aplicador especial.

Tras su inserción por parte de un profesional, este método comenzará a actuar al poco tiempo. Debes seguir las recomendaciones que te dé un doctor para evitar cualquier tipo de complicaciones.

Cuando quieras retirarlo o cambiarlo podrás hacerlo sin problemas tras visitar nuevamente al especialista. Un DIU de cobre puede permanecer en nuestro cuerpo durante unos diez años.

5. ¿Qué problemas pueden aparecer durante la inserción?

En algunos casos durante la inserción del DIU pueden aparecer algunos efectos como mareos, necesidad de dilatación cervical, dolor o imposibilidad de inserción. La tasa de perforación uterina es muy baja.

Tras la primera mestruación o después de 3 a 6 semanas es habitual realizar una visita de control con el ginecólogo. También es recomendable hacerse una ecografía para verificar que está ubicado en el lugar correcto.

6. ¿Qué efectos adversos puede provocar?

Como principal inconveniente del DIU de cobre está el cambio en el parón de sangrado y dolor menstrual que puede producir. Ello suele ser más habitual en los primeros meses y normalmente mejora con el tiempo.

Aunque no es nada frecuente, existe la posibilidad de que el método falle. Esto es más probable dentro del primer año de utilización.

No se recomienda el uso del DIU en mujeres con un historial médico con infecciones pélvicas o en los órganos femeninos. Tampoco se debe utilizar en caso de padecer enfermedades sexuales o de ser alérgicas al cobre.

Pese a estas excepciones, el DIU de cobre suele ser una buena opción para mujeres de cualquier edad que no deseen quedarse embarazadas al tener más de un 98% de efectividad y ser un método discreto y de sin efecto sobre el riesgo de cáncer.

Compartir:

Facebook
Twitter
Telegram
Más entradas

Artículos relacionados

Test Prenatal No Invasivo: qué es y para qué sirve

La tecnología médica avanza a pasos agigantados y uno de los desarrollos más recientes en el ámbito prenatal es el Test Prenatal No Invasivo o TPNI. Este ofrece a los futuros padres una opción más segura y precisa para evaluar la salud del feto durante el embarazo, sin tener que recurrir a procedimientos invasivos. En este artículo te contamos qué es y para qué sirve esta prueba de screening avanzado. ¿En qué consiste el Test Prenatal No Invasivo? A diferencia de otras pruebas tradicionales, como la amniocentesis, que conllevan ciertos riesgos para el feto, el TPNI es una alternativa de bajo riesgo tanto para la madre como para el bebé. El proceso es bastante sencillo y consiste en recoger una pequeña muestra de sangre de la madre para luego analizarla con el fin de identificar fragmentos de ADN fetal. Estos proporcionan información crucial sobre la salud genética del feto. ¿Qué puede detectarse con esta prueba? Con este test podremos detectar diversas anomalías genéticas y cromosómicas, como el síndrome de Down (trisomía 21), el síndrome de Edwards (trisomía 18) o el síndrome de Patau (trisomía 13). Además, puede ofrecernos información sobre el sexo del bebé y algunas condiciones genéticas hereditarias. Esta capacidad de detección temprana permite a los padres tomar decisiones informadas sobre su embarazo y, en algunos casos, prepararse para las necesidades médicas especiales que el bebé pueda tener. El Test Prenatal No Invasivo en la Clínica Dr. Herraiz En el Centro Médico Herraiz de Castellón esta prueba se realiza con el respaldo de Bio Cord. El test, también conocido como BBsafe, puede llevarse a cabo a partir de la semana 10 (o de la 12, en caso de gestación gemelar). Los resultados estarán disponibles en 4 días laborales tras la recepción de la muestra en el laboratorio. Además, se brinda la opción de combinar el TPNI con la preservación de células madre del cordón umbilical, ofreciendo mayor seguridad y preparación ante cualquier eventualidad.

Microbiota vaginal: qué es y qué función desempeña

En este artículo nos adentramos en un tema crucial, pero a menudo pasado por alto: la microbiota vaginal. En la Clínica Dr. Herraiz reconocemos la importancia de comprender a fondo este ecosistema único que reside en el canal vaginal y su impacto en la salud íntima de las mujeres. Pero… ¿qué es realmente la microbiota vaginal y cuál es su función en el equilibrio de nuestro bienestar ginecológico? Te lo explicamos. ¿Qué es la microbiota vaginal? El término se refiere a la comunidad de microorganismos que viven en la vagina. Su composición es variable y se ve afectada por factores como la edad, la ubicación específica en la vagina, la fase del ciclo menstrual o la actividad sexual. Aunque puede haber una gran diversidad entre una mujer y otra, es fundamental entender que esto no indica que haya una enfermedad. ¿Para qué sirve la flora vaginal? La microbiota vaginal desempeña un papel fundamental en la salud íntima de las mujeres. Entre sus principales funciones encontramos: Mantenimiento del pH vaginal: los lactobacilos son productores naturales de ácido láctico, lo que crea un entorno vaginal ácido. Este pH bajo ayuda a prevenir el crecimiento excesivo de bacterias patógenas. Protege contra infecciones: la microbiota vaginal actúa como una barrera protectora, impidiendo la colonización de microorganismos dañinos. Esta defensa natural es esencial para prevenir infecciones bacterianas y fúngicas, como la vaginosis bacteriana y la candidiasis. Favorece la fertilidad: un equilibrio adecuado en la microbiota vaginal es crucial para la salud reproductiva. Y es que contribuye a mantener un ambiente propicio para los espermatozoides y favorece la supervivencia de los óvulos, facilitando así el proceso de fertilización. Regula el sistema inmunológico: esto es esencial para mantener un equilibrio entre la protección contra patógenos y la tolerancia a los microorganismos beneficiosos. ¿Cuáles son los factores que afectan a la flora vaginal? Existen diversos factores que pueden afectar a la salud de la flora vaginal, entre ellos: Los niveles hormonales, particularmente durante el ciclo menstrual, el embarazo y la menopausia, influyen en la composición de la microbiota vaginal. El uso prolongado de antibióticos u otros medicamentos puede alterar el equilibrio microbiótico, predisponiendo a infecciones. Ciertas prácticas de higiene íntima, como el uso excesivo de duchas vaginales o productos perfumados. Actividad sexual: las relaciones sexuales, especialmente sin protección, pueden alterar temporalmente la microbiota vaginal. Cambios en la dieta: la alimentación puede tener un impacto en la microbiota de todo el cuerpo, incluida la vaginal. Una dieta equilibrada puede promover un ambiente más saludable. Enfermedades o problemas de salud: ciertas condiciones médicas, como la diabetes, pueden afectar la acidez y el entorno de la vagina, alterando la flora. ¿Cuáles son los síntomas de un ecosistema vaginal desequilibrado? Cambios en el color, el olor o la textura de la secreción vaginal pueden indicar un desequilibrio en la flora. La presencia de microorganismos no deseados también puede causar picazón, irritación o sensación de ardor. Además, una flora vaginal desequilibrada puede contribuir a infecciones del tracto urinario, resultando en molestias al orinar. Otro síntoma está relacionado con sentir dolor o molestias durante las relaciones sexuales. La importancia de las revisiones para detectar anomalías En resumen, la microbiota vaginal desempeña un papel crucial en la salud íntima y reproductiva de las mujeres. Mantener un equilibrio adecuado es clave para prevenir infecciones y promover la salud general, destacando la importancia de recibir cuidados adecuados y el respeto por los procesos naturales del cuerpo. Te recomendamos no faltar a tu cita con tu ginecólogo de confianza para comprobar que tu flora vaginal está en condiciones óptimas.

Qué es el SIBO y cuál es su sintomatología

El Sobrecrecimiento Bacteriano del Intestino Delgado es una afección que cada vez afecta a más pacientes. Si alguna vez has experimentado malestar abdominal o problemas digestivos persistentes, este artículo sobre el SIBO y su sintomatología puede resultarte muy útil. ¿Qué es el SIBO? El SIBO (Small Intestine Bacterial Overgrowth en inglés)  es una condición que involucra la proliferación excesiva de bacterias en la parte del tracto digestivo que normalmente debería tener una cantidad reducida de estos microorganismos. Esto puede desencadenar una serie de síntomas, que afectan la calidad de vida de quienes lo padecen. Indicios y síntomas Los signos del SIBO son variados, lo que frecuentemente lleva a que esta condición pase desapercibida o se confunda con otros problemas. Algunos de los síntomas más comunes, según la nutricionista del Centro Médico Dr. Herraiz, Estela Jiménez, son: 1.   Hinchazón abdominal En el contexto del SIBO, esta hinchazón puede estar relacionada con la producción excesiva de gases por parte de las bacterias en el intestino delgado. Esto puede dar lugar a una acumulación de flatulencias y una sensación de hinchazón poco después de comer. 2.   Dolor o malestar en el vientre El dolor o malestar abdominal puede manifestarse de diversas formas, como cólicos, molestias o dolores más agudos. Este síntoma puede ser el resultado de la inflamación o la irritación causada por el exceso de bacterias y gases en el intestino delgado. 3.   Diarrea o estreñimiento persistentes Las bacterias en exceso pueden afectar la absorción de nutrientes y agua, lo que lleva a cambios en la consistencia y regularidad de las deposiciones. 4.   Deficiencias nutricionales por absorción deficiente Un exceso de bacterias en el intestino delgado puede competir con el cuerpo por la absorción de nutrientes esenciales, como vitaminas y minerales. Esto puede llevar a deficiencias nutricionales, incluso si estás siguiendo una dieta equilibrada. Estos déficits pueden tener un impacto en tu salud en general y empeorar los síntomas del SIBO. 5.   Problemas extradigestivos El SIBO también cuenta con problemas más allá de los relacionados con el aparato digestivo, extendiéndose a otras áreas del cuerpo y pudiendo causar migrañas, cansancio, fatiga y dolor articular, entre otros. Factores de riesgo Se han identificado varios factores de riesgo para el SIBO, por ejemplo: Ingesta de medicamentos que disminuyen la motilidad intestinal, como puede ser el caso de los narcóticos, los anticolinérgicos o los antidiarreicos. Causas estructurales, como adherencias o la diverticulosis del intestino delgado. Esta afección hace que se formen sacos o divertículos en la pared interna del intestino. Debido a cirugías abdominales, como puede ser un bypass gástrico en pacientes con obesidad. Falta o ausencia de ácido gástrico. Alteración de la motilidad del intestino delgado debido a problemas de celiaquía, diabetes u otras dolencias. ⠀ Si sospechas que podrías estar lidiando con la afección debes saber que es fundamental buscar ayuda médica, puesto que un diagnóstico preciso es el primer paso hacia una mejora notable de la calidad de vida. En el Centro Médico Dr. Herraiz te ofrecemos un enfoque integral te guiará hacia el camino de la recuperación y el bienestar digestivo.

El ejercicio, un buen aliado para la fertilidad

Si estás buscando quedarte embarazada, el ejercicio puede convertirse en tu mejor aliado. Más allá de los beneficios para la salud en general, practicar deporte puede tener un impacto positivo en tu fertilidad. En este artículo te contamos cómo puede mejorar tu estado físico, aumentar tu bienestar, regular tus hormonas, estimular la circulación sanguínea y contribuir a mantener un peso saludable. Todo ello, favoreciendo a tus posibilidades de concebir de forma natural. Mejora tu estado físico y favorece el sistema reproductor El ejercicio regular no solo fortalece tus músculos y mejora tu resistencia, sino que también favorece el buen funcionamiento del cuerpo en general, incluyendo el sistema reproductor. Al mantenernos activas, promovemos la salud de nuestros órganos reproductivos, lo que es crucial para lograr una concepción exitosa. Además, una condición física óptima puede preparar tu cuerpo para el embarazo y facilitar el proceso de gestación. Aumenta tu bienestar emocional y reduce el estrés Sentirse bien con una misma, tanto física como emocionalmente, es fundamental para la fertilidad. El ejercicio libera endorfinas, las conocidas «hormonas de la felicidad», lo que nos hace sentir más positivas y enérgicas. Este bienestar emocional puede tener un impacto directo en nuestra salud reproductiva, ya que reduce los niveles de estrés, un factor que puede afectar negativamente la fertilidad y dificultar el embarazo. Promueve la regulación hormonal y mejora la función reproductiva El deporte puede jugar un papel importante en el equilibrio hormonal de nuestro cuerpo. Mantenernos activas y en forma contribuye a mantener niveles adecuados de hormonas, lo que es esencial para una función reproductiva óptima. Además, mantener un peso saludable mediante el ejercicio también puede aumentar las posibilidades de quedar embarazada. Estimula la circulación sanguínea y favorece la fertilidad Actividades como correr, nadar o montar en bicicleta mejoran la circulación sanguínea en todo el cuerpo, incluyendo los órganos reproductivos. Esto aumenta la irrigación de los ovarios y el útero, lo que favorece la fertilidad; también puede contribuir a mantener el endometrio en buenas condiciones para la implantación del óvulo fertilizado. Contribuye a mantener un peso saludable y favorece el embarazo El ejercicio, combinado con una alimentación equilibrada, puede ayudarnos a alcanzar y mantener un peso saludable. Y es que, tener un índice de masa corporal adecuado puede mejorar la ovulación y la regularidad del ciclo menstrual, lo que aumenta las posibilidades de concepción. Si estás buscando un embarazo, no dudes en incorporar la actividad física en tu rutina diaria y consulta con un profesional de la salud para obtener orientación personalizada.

You have been successfully Subscribed! Ops! Something went wrong, please try again.

Medigine Herraiz SL © 2024 Desarrollado por Asertic Consultores
| Financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU

Ir al contenido