¿Problemas de sueño, falta de energía, disminución del interés sexual o incluso episodios depresivos? Estos son algunos de los síntomas de entrada en la menopausia que padecen muchas mujeres. Sin embargo, la prevención y el cambio de enfoque psicológico juegan un papel fundamental a la hora de afrontar esta etapa al final de nuestra vida fértil. Tal y como explica el doctor José Luis Herráiz, ginecólogo del Hospital Vithas Castellón y del Centro Médico Dr. Herraiz: «el fin de la menstruación implica que los ovarios dejan de producir óvulos, lo que provoca una disminución en los niveles de las hormonas femeninas. Este cambio trae, en ocasiones, sofocos, sequedad vaginal u osteoporosis, entre otros efectos que pueden llegar a ser molestos o perjudiciales para la salud». Según el especialista castellonense, «para prevenir la osteoporosis hay que hacer ejercicio de forma habitual o dar paseos diarios de una hora como mínimo; también es recomendable aumentar la ingesta de alimentos ricos en calcio y exponerse al sol con moderación para aumentar la vitamina D». Respecto al ejercicio físico, hace especial hincapié en el fortalecimiento del suelo pélvico. Por otra parte, es recomendable cuidar el corazón siguiendo una dieta sana baja en grasas y rica en frutas y verduras, que son antioxidantes y ricas en vitaminas A, C y D. Otra recomendación es la ingesta de pescado azul, rico en Omega 3, además de tomar alimentos que aumenten los niveles de estrógenos. Por ejemplo los vegetales que contengan ácido fólico o la soja. «Con todas estas pautas – apunta- se pueden mitigar los efectos de la menopausia hasta en un 70%». Para cualquier consulta más específica no dudes en escribirnos o llamarnos a nuestro teléfono de atención y comentarnos tu caso. El Dr. Herraiz estará encantado de atenderte en consulta. Además, puedes seguir este blog para estar al día de la actualidad médica y de las novedades en nuestro centro.
Principales diferencias entre menopausia y climaterio
Aunque los términos menopausia y climaterio están relacionados con la misma etapa del ciclo reproductivo de la mujer, no son lo mismo. En el primer caso estamos ante el fin de la menstruación, mientras que el segundo proceso tiene que ver con los cambios que se experimentan a medida que se pierde capacidad reproductiva. Sigue leyendo para conocer las principales diferencias entre menopausia y climaterio. La Menopausia Hablamos de una fecha concreta, que marca la última menstruación en la vida de una mujer. La menopausia determina el fin de su etapa fértil, como consecuencia de una disminución en la producción de hormonas relacionadas con la reproducción. Por ejemplo, los estrógenos y la progesterona. Para determinarla es necesario que transcurran 12 meses consecutivos sin menstruación, punto a partir del cuál se identifica el día exacto de forma retrospectiva. De este modo, si una mujer tuvo su última menstruación el 15 de enero de 2018 y no volvió a menstruar, se deberá esperar hasta el 15 de enero de 2019 para asegurar la fecha de inicio de la menopausia. El Climaterio Por su parte, el climaterio hace referencia a un proceso y no a un punto concreto. Este ciclo comienza alrededor de los 40 años y está marcado por una disminución de la actividad ovárica y de la fertilidad. Las mujeres pueden comenzar a experimentar los siguientes síntomas. Aparición de irregularidades en la menstruación. Es típico que haya ciclos más cortos, de entre 23 y 25 días. En una segunda fase tienden a ser más largos, de entre 35 o 40 días. Comienzan a tenerse sofocos. Se experimenta una sensación de calor que sube desde el cuerpo hacia la cabeza. Cambios en el estado de ánimo. Más irritabilidad, episodios de angustia o de ansiedad. Esto se debe a que la merma en la cantidad de estrógenos provoca trastornos en el comportamiento. Suele ser habitual que haya una disminución del deseo erótico y también la aparición de dolor durante las relaciones sexuales. Más allá de las diferencias entre menopausia y climaterio Aunque presenta signos muy característicos, no estamos ante una patología, sino ante una serie de cambios normales en el cuerpo de la mujer. Lo que sí tienen en común la menopausia y el climaterio es que marcan el comienzo de una nueva etapa en la se debe prestar una mayor atención a la salud. Los exámenes mamarios y ginecológicos regulares son muy importantes durante este periodo. También el llevar un estilo de vida saludable con una dieta adecuada y ejercicio regular.
Un 40% de las mujeres sufre problemas vaginales durante la menopausia
El tratamiento y el control ginecológico son claves para dar solución a los problemas vaginales durante la menopausia. Éstos pueden derivarse de los cambios hormonales que se producen durante esta etapa y que inciden en aquellos órganos relacionados con los estrógenos. La secreción vaginal se reduce y ello motiva la aparición de picores, irritación y dolor en las relaciones sexuales. Tal como explica el doctor José Luis Herraiz Roda, ginecólogo del Hospital Vithas Nisa Rey Don Jaime de Castellón, “con la disminución considerable de estrógenos que se produce tras la menopausia, los tejidos de la vagina suelen perder grosor, humectación y elasticidad. Estos cambios que afectan el área urogenital de la mujer en la menopausia se conocen como vaginitis atrófica». De hecho, se estima que más del 40 por ciento de las mujeres postmenopáusicas tiene dolor vaginal con sensación de ardor o picazón, flujo vaginal escaso, ardor al orinar, sangrado escaso después de la relación sexual o dolor durante la misma. Estos síntomas, además de ser muy incómodos, afectan directamente a la salud sexual, añade el especialista. Tratamiento y hábitos diarios Para aquellas mujeres con problemas de atrofia vaginal es fundamental que el ginecólogo prescriba un tratamiento hormonal adecuado. Así puede compensarse la falta de estrógenos provocada por la menopausia. “El tratamiento a base de estrógenos, -comenta el doctor Herraiz-, asegura la restauración del pH vaginal, aumenta las secreciones y evita el malestar debido a esa sequedad”. Adquirir hábitos saludables también ayuda a mejorar la hidratación de la zona. La ingesta de agua a lo largo del día, por ejemplo, aumenta los fluidos. Por otro lado, es bueno evitar el tabaco y el alcohol, ya que disminuyen los estrógenos. A nivel de higiene íntima hay que tener en cuenta no utilizar productos que sean secantes. “Se deben adquirir jabones hipoalergénicos y que respeten el pH de la piel. Además, si se quiere una hidratación específica para la zona, hoy en día existen hidratantes con ingredientes 100% naturales”. La dieta también permite mejora la sequedad vaginal. En concreto, las isoflavonas imitan el efecto del estrógeno y se pueden encontrar en alimentos como la leche de soja, el tofu o los edamames. Según el ginecólogo del Centro Médico Dr. Herraiz, “es importante una dieta saludable y saber que alimentos como los aguacates, los aceites vegetales, las cerezas, las manzanas, las nueces y el pescado azul están repletos de grasa saludable que trabajará para darte una gran cantidad de beneficios que incluyen más humedad vaginal”.
Cómo mitigar los efectos de la menopausia hasta en un 70%
Para muchas mujeres, entrar en la menopausia marca un antes y un después en su ciclo vital. Los ovarios femeninos dejan de producir óvulos y la mujer entra en la fase de climaterio. Ello puede generar problemas de sueño, falta de energía, disminución del interés sexual e, incluso, episodios depresivos. Pero no a todas las mujeres afecta por igual. ¿Cómo mitigar los efectos de la menopausia? La prevención y el cambio de enfoque psicológico juegan un papel fundamental. La prevención y cómo mitigar los efectos de la menopausia El doctor Herraiz explica que el fin de la menstruación provoca una disminución en los niveles de las hormonas femeninas: estrógenos y progesterona. Este cambio trae en ocasiones sofocos, sequedad vaginal, osteoporosis… pero muy pocas pacientes necesitan terapia hormonal. Llegar a la menopausia con la mejor salud posible hace que los daños colaterales se atenúen. Para prevenir la osteoporosis hay que: Hacer ejercicio de forma habitual o dar paseos diarios de una hora como mínimo. A la hora de hacer ejercicio, se recomienda realizar aquellos que favorezcan el fortalecimiento del suelo pélvico. Aumentar la ingesta de alimentos ricos en calcio y exponerse al sol con moderación para aumentar la vitamina D. Cuidar el corazón siguiendo una dieta sana baja en grasas y rica en frutas y verduras. Estos alimentos son antioxidantes y ricos en vitaminas A, C y D; tambien es buena la ingesta de pescado azul rico en Omega 3, además de ingerir alimentos que aumenten los niveles de estrógenos como los vegetales que contengan ácido fólico o la soja. No hay que olvidar que, durante la menopausia, las necesidades nutricionales de la mujer ya no son las mismas y, por lo tanto, el aporte calórico deberá ser menor. Con todas estas pautas sobre cómo mitigar los efectos de la menopausia, pueden hacer se reduzcan hasta en un 70%”. La salud psíquica también es fundamental Durante la menopausia el 15% de las mujeres sufren algún episodio de depresión o tristeza severa. Además, se estima que el 25% experimenta insomnio, ansiedad o cambios de humor. Sin embargo esta situación puede cambiar o por lo menos mitigarse viendo la menopausia como una nueva etapa de crecimiento individual, donde una vez superada la crianza de los hijos te sientes más libre para dedicar tu tiempo y energía a ti misma. Este cambio de actitud trae como consecuencia un mayor bienestar psicológico. Como en cualquier otro periodo de cambio y transición, no resulta extraño padecer sentimientos de pena. Tienes que darle la vuelta a lo “perdido” (la juventud, la capacidad reproductiva o los hijos que se han ido de casa) y verlo como un aporte de energía, experiencia en la vida y sabiduría para saborear los frutos de tus esfuerzos.
Sangrado después de la menopausia. Todo lo que debes saber
Algunas mujeres pueden experimentar un sangrado después de la menopausia. Es lo que los especialistas llaman una metrorragia postmenopáusica y aparece después de un año o más sin regla. Cuando se produce uno de estos episodios, no debe pasarse por algo. Toma nota de todo lo que debes saber sobre ellos. ¿Es normal que se produzca un sangrado después de la menopausia? No, es una circunstancia anormal que debe revisarse. Durante la llegada de la menopausia se producen desarreglos, pero si se produce un sangrado genital después de 12 meses ininterrumpidos sin menstruar debes acudir con tu ginecólogo de confianza. De este modo el especialista podrá evaluar lo ocurrido y asegurarse de que todo está bien. Causas que pueden provocar sangrados o flujos rosados tras la menopausia En algunos casos estos sangrados o flujos rosados pueden ser síntoma de algún problema de salud que conviene tratar, por eso es tan importante que realices una revisión médica. Algunas de las causas que pueden provocar la metrorragia postmenopáusica son: Una atrofia del endometrio. Debido a la disminución del nivel de estrógenos, el endometrio se vuelve más fino y frágil. Estas circunstancias pueden provocar un sangrado anormal. Un pólipo endometrial. Es una tumoración benigna que crece habitualmente en el útero o en el canal cervical. Puede originar un sangrado irregular o intenso. Hiperplasia endometrial. Se produce cuando las células endometriales crecen desmesuradamente, haciendo que el revestimiento del útero aumente su grosor. Cáncer de endometrio debido a una tumoración maligna en el endometrio, que es la capa de células que recubre el interior del útero. Este es uno de los tipos de cáncer más comunes del sistema reproductor femenino y una de sus señales es, precisamente, el sangrado después de la menopausia. Tratamiento más habitual El tratamiento del sangrado después de la menopausia dependerá de cual sea la causa. Para ello el doctor analizará la historia clínica de la paciente y realizará un examen físico y ginecológico. Además, puede pedir que se realicen las siguientes pruebas: una biopsia del endometrio, una ecografía transvaginal o una histeroscopia. Con los resultados en mano ya podrá indicar qué hacer en cada caso. Normalmente, si no hay contraindicaciones, la atrofia puede tratarse con una crema especial. Si el sangrado se debe a la presencia de pólipos o tumoraciones, es posible que deban extraerse mediante una histeroscopia o una histerectomía. Sea como sea, un diagnóstico precoz será clave para que el tratamiento sea exitoso.
La llegada de la menopausia: consejos para afrontar esta etapa
La palabra menopausia significa «cese mensual» y hace referencia a la desaparición de la menstruación. Suele producirse en torno a los 50 años y es una etapa más en la vida de toda mujer. No obstante, el momento en el que aparece y los cambios y alteraciones que produce varían en cada caso. En este artículo os hablaremos de cuáles son y os daremos algunos consejos para afrontar mejor esta etapa. La menopausia y sus etapas La menopausia comprende dos etapas principales: La perimenopausia: es la fase que precede a la última hemorragia menstrual controlada por los ovarios. La postmenopausia: ésta se produce un año después del cese de la regla y finaliza hacia los 65 años. Durante la menopausia la mujer debe prestar especial atención a su cuerpo y cuidar sus hábitos para mantenerse sana y no perder calidad de vida con los cambios físicos y emocionales que pueden llegar a producirse. Cambios y alteraciones más frecuentes Los cambios más frecuentes que suelen producirse al final de la edad fértil, son: Sofocos. Es uno de los más habituales. La mujer experimenta un calor que recorre todo el cuerpo, pero especialmente el cuello, la cara y la cabeza. Cada sofoco puede durar entre 30 segundos y varios minutos. En algunos casos termina con un sudor frío. Sequedad en la piel Alteraciones del sueño Pérdida de memoria Cambios de humor La frecuencia de cada síntoma varía en cada caso. Mientras que para algunas mujeres solo son problemas menores, para otras pueden resultar muy molestos y un obstáculo para su vida social o profesional. Durante esta época pueden producirse también algunas alteraciones asociadas a la menopausia, como la osteoroposis – por la disminución de los niveles de estrógenos -, la sequedad vaginal y problemas cardiovasculares. Consejos para afrontar la llegada de la menopausia El secreto para afrontar la llegada de la menopausia no es otro que manener un estilo de vida salubable, teniendo una actitud positiva, practicando ejercicio y, sobre todo, cuidando la alimentación. Algunos consejos que pueden ayudar a conseguirlo son: – Una dieta rica en calcio. Para ello se aconseja tomar cuatro raciones de productos lácteos al día, como leche, yogur o quesos. – Controla la ingesta de grasas. Cocina preferentemente con aceite de oliva y evita la manteca y los alimentos que puedan disparar el colesterol. – Haz un uso moderado de la sal para prevenir la hipertensión arterial. – Aumenta el consumo de frutas, verduras y cereales. Estos alimentos son fuente de vitaminas, minerales y fibra. – Se recomienda beber de 1,5 a 2 litros de agua a diario para mantener una buena hidratación. – Para cubrir las necesidades de vitamina D toma el sol una media hora diaria y sigue una dieta equilibrada. – Los paseos diarios y la natación son altamente recomendables para prevenir la osteoporosis y los problemas de corazón. Siguiendo todas estas recomendaciones será más fácil convivir con esta serie de cambios que se producen durante la menopausia y aceptarlos de una forma proactiva y optimista. Y recuerda: ante cualquier duda o signo que te parezca preocupante, acude a tu ginecólogo de confianza.